Hierbas medicinales que
embellecen la piel. A lo largo de los siglos, las mujeres han usado productos
naturales para embellecer su piel. Se dice que Cleopatra se bañaba en leche de
burra para lograr una dermis perfecta. Aquí, sin llegar a esos extremos,
ofrecemos una serie de consejos naturales para lucir radiante.
Limpiador para la dermis
Uno de los ingredientes perfectos
para la piel y que se encuentra en tu propia cocina es la leche. Todo lo que
necesitas hacer es sumergir un trozo de algodón en leche y limpiar tu cara con
ella. Además, limpia la suciedad invisible y reduce tus poros. Otro limpiador
es el aceite de almendras, especialmente eficaz para la protección de la
delicada piel que se encuentra bajo los ojos.
Hidratantes para la piel
Para el cuidado de la piel
normal, coge una taza de yogur, una cucharada de zumo de naranja y una
cucharada de zumo de limón y mezclarlas hasta formar una pasta. Aplícala en la
cara como una mascarilla y déjala puesta durante 15 minutos. A continuación,
limpia con un pañuelo mojado.
Para la piel seca, se puede
utilizar una mezcla de harina de avena cocida con miel: no sólo ayudará a
hidratar la piel, sino que también actúa como un agente de limpiador.
Prevención de arrugas
Para prevenir las arrugas y
suavizar la piel, puedes probar el aceite de ricino puro.
Acondicionador para la piel
Un excelente acondicionador que
puede ser hecha de una cucharada de miel mezclada con 2 cucharadas de crema (de
leche). Deja actuar durante unos minutos y lava. ¡Funciona!
Defectos en la piel
Para manchas de la piel, puedes
frotar una patata cruda en la zona dañada.
Loción de protección solar
Vamos a finalizar con una buena
crema de protección solar hecho en casa. Tomar zumo de pepino y la misma
cantidad de glicerina y agua de rosas. Mezcla todo bien y mételo al
frigorífico.
Ilumina
tu rostro: Mascarilla de avena y miel
Como lo hemos mencionado en
reiteradas oportunidades, nuestra piel, en especial la del rostro, puede verse
seriamente afectada por factores externos, como la contaminación ambiental en
las grandes ciudades o el clima, por lo que nos resultan
igualmente nocivos tanto la exposición sin protección al sol, como el frío intenso o el viento. Estas agresiones pueden resecar y opacar nuestro cutis. Te hemos
aconsejado que exfolies e hidrates tu
piel y te inclines por productos que contengan un factor de protección
solar. Para completar el plan de protección, te contamos como realizar una
sencilla mascarilla de avena y miel para devolverle a tu rostro la vitalidad y
elasticidad que estos factores externos pueden arrebatarle.
El ingrediente principal de esta
mascarilla es la avena, su uso se ha incrementado en cosmetología en los ultimos años debido a sus propiedades
benéficas para la piel, en especial por
contener una sustancia similar a los estrógenos ( los fitoestrógenos), lo que la convierte en uno
de los compuestos utilizados con mayor eficacia
en productos cosméticos tanto
para pieles maduras como para los
bebes.
Entre sus virtudes se encuentran
la de equilibrar el pH natural de la piel, suavizarla, relajarla y evitar que se
deshidrate. Remueve sus impurezas
sin agredirla y respetando su estructura. Es regeneradora y calma las
irritaciones.
Esta mascarilla otorga muy buenos
resultados en pieles que se han expuesto al clima sin la protección adecuada.
Prepárala facilmente:
- Harina de avena extrafina 150 grs.
- Miel, 2 0 3 cucharadas.
- Yema de huevo 1.
- Esencia de lavanda 10 gotas
Mezcla todos los ingredientes en
un recipiente.
Aplica la mezcla con una compresa
de gasa, para poder distribuirla mejor en tu rostro. Déjala actuar durante 30
minutos y enjuaga muy bien con agua tibia.
Muy interesante la entrada Carmen.
ResponderEliminarPásate por mi blog, que tienes un premio.
Un abrazo
El Desván de Encanta